Las obras de rehabilitación estructural del firme del tramo urbano de la carretera Jaraíz-Pasarón (CC-31.3), que comprende desde el mirador o monumento de los moteros hasta la intersección de la EX-203, ha concluido con el pintado de las líneas y señalización horizontal de la calzada, casi dos meses después de que se asfaltara.
El retraso en la finalización se ha debido principalmente a la lluvia y también a que ha sido necesario volver a alquitranar una de las márgenes del tramo comprendido entre el IES Maestro Gonzalo Korreas y la barriada de Gabriel y Galán.
El arreglo de esta carretera provincial (que discurre por la avenida de la Montaña) lo ha venido solicitando el Ayuntamiento en los últimos años de manera insistente a la Diputación de Cáceres, la titular de la esta vía, que la incluyó para su rehabilitación en el paquete de inversiones aprobado en mayo de 2022, denominado IDE (Infraestructuras de Datos Espaciales), a tenor de las gestiones realizadas por el Consistorio jaraiceño.
Las actuaciones que se han llevado a cabo han sido las de fresado, pavimentación y señalización del firme, que no se había vuelto asfaltar de manera integral desde hacía algo más de dos décadas, pese a que se trata de una vía interurbana de mucho tráfico y salida de varias localidades del Valle del Jerte y veratas hacia Madrid o Badajoz.
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