Ya han finalizado las obras en el cementerio municipal – a falta de algunos remates- para comunicar el antiguo con el nuevo con el objeto de facilitar el acceso de los usuarios a los espacios comunes existentes en ambos, entre otros, los aseos públicos.
Para ello, ha sido preciso el traslado de varias unidades de enterramientos pegadas al muro del camposanto viejo, que es la pared de linde o medianera de los dos, cuyo procedimiento ha estado en exposición pública para conocimiento de los propietarios afectados.
Una vez trascurrido el plazo reglamentario de información pública y todos los procedimientos sin que se hayan presentado alegaciones ni reclamaciones se ha procedido a la ejecución del proyecto, que ha consistido, primero, en los traslados de cuatro lápidas o filas con seis inscripciones de enterramientos realizados en los años 1904, 1911, 1936, 1944, 1949 y 1961. Y, por último, en la apertura de un acceso o portada, ya finalizada, que permite el paso de un recinto a otro.
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